
A lo largo de la historia de la humanidad, las mujeres han recibido un trato desigual en relación con los hombres, esta medición fue construida principalmente en el terreno de las leyes, alimentada a su vez por la filosofía de los griegos y romanos – cunas de la civilización occidental y base principal de la jurisprudencia actual.
Estas filosofías consideraban que las mujeres eran inferiores a los hombres y en consecuencia, las leyes trasladarían esta creencia a sus códigos; por lo que la defensa de bienes jurídicos en sociedad, se hizo protegiendo la propiedad de los hombres, ya fuera material o humana, a través de sus mujeres y descendencia.
Los Derechos Humanos del Hombre y del Ciudadano fueron el fruto de la revolución francesa, en 1789, sentando las bases de una norma jurídica creada con los ideales de libertad y justicia, aunque es necesario aclarar que dicho documento no incluyó a las mujeres. Fue Olympe de Gouges – seudónimo de la escritora, dramaturga, panfletista y filósofa política francesa, Marie Gouze, quien escribió la Declaración de los Derechos de la Mujer y de la Ciudadana, en 1791. Declarada traidora por rebelarse a su tiempo y sostener que las mujeres tenían derechos de ciudadanía, la condenaron a morir guillotinada.
Este es solo uno de los ejemplos en los que la sociedad da un paso hacia un futuro brillante y equitativo y dos pasos hacia atrás, porque hacía falta una herramienta importantísima que hoy en día es imprescindible: la perspectiva de igualdad de género. La lucha de las mujeres comenzó hace años y aunque existan un sinfín de heroínas feministas en la historia, queremos centralizarnos en los problemas actuales.
Los derechos laborales de las mujeres en México, en palabra, existen porque están escritos en la norma jurídica, pero ¿y la práctica social? Es nuestro deber moral mantenernos siempre a la vanguardia, desaprendiendo sesgos cognitivos que el patriarcado creó dando a los hombres privilegios y poderes que las mujeres no ostentan.
En México, ser una mujer profesionista representa por sí mismo un gran logro, ya que de acuerdo con los datos con lupa de género del IMCO (Instituto Mexicano para la Competitividad), publicados en la página delCentro de Investigación en Política Pública, tan solo 3 de 10 mujeres estudian hasta el nivel medio superior, mientras que solo 4 de 10 son económicamente activas.[1]
La participación de las mujeres trabajadoras en México es baja porque mientras 7 de 10 hombres participan en la economía, solo 4 de 10 mujeres lo hacen. Y esto es un problema, porque la baja participación de las mujeres y la falta de condiciones equitativas en el mercado laboral frenan el potencial económico del país. Para el 2030, el PIB de México podría ser 15% mayor que el PIB del 2020 si el gobierno y el sector privado implementan acciones para sumar a 8,2 millones de mujeres a la economía.
Sin embargo, las mujeres enfrentan distintas barreras para integrarse y permanecer en la economía remunerada. Una de las barreras es la repartición poco equitativa de las tareas domésticas y de cuidados, ya que reduce el tiempo que tienen disponible para la actividad laboral.
Dentro del mismo artículo de IMCO podemos encontrar un estudio que determina el porcentaje de puntos que ofrece cada estado sobre las óptimas condiciones laborales para las mujeres. A excepción de Ciudad de México y Baja California Sur (con 64.8 y 62.1 puntos respectivamente), todas las entidades del país reprobaron. Michoacán se encuentra en el vigésimo lugar de la lista con 40.5 puntos de 100.
Como podemos apreciar, es importante continuar nutriéndonos con estos temas para encontrar juntos una solución. Porque problemas colectivos ameritan soluciones colectivas. Es por esta razón que CEEUNI desarrolló el Panel Internacional: Derechos Laborales de las Mujeres, un curso de género que comenzará el 23 de febrero del 2023 donde se abordarán los aspectos jurídicos de estas problemáticas y sus posibles soluciones.
El Centro de Estudios Universitarios e Investigación siempre opta y apuesta por la vanguardia y genera este tipo de eventos para contribuir a un futuro brillante para nuestra nación.
[1] IMCO (2022, 7 de marzo) Datos #Conlupadegénero https://imco.org.mx/datos-conlupadegenero/